miércoles, 26 de noviembre de 2014

Una telenovela que dará de qué hablar...

En Estrasburgo, el Papa Francisco en su discurso (mejor dicho palabras que brotan del corazón, él casi no sigue lo que dicen los papeles) en el Parlamento Europeo hablaba de la importancia y la dignidad del trabajo, del triste y dramático momento que viven los refugiados de países en guerra y de la dignidad. Mencionó varias veces la palabra dignidad.

La crónica de hoy no va referida a Francisco, a quien bien podría dedicarle un par de páginas (llegará el momento, ya verás) pero los conceptos a los que hizo referencia me vinieron "al hilo" de este tema del que me convoca hoy.

Jadan Turki, a quien ya puedo nombrar "mi corresponsal" en asuntos islámicos, cuando le pregunté si conocía la telenovela Estado Mítico, que satiriza al grupo yihadista y critica al califato del Estado Islámico, me respondió textualmente: "He visto la actuación de los artistas iraquíes pero el problema es mucho más serio que todo esto. El futuro de Oriente Medio está en peligro. Creo sinceramente qu es una conspiración internacional contra los pueblos de la zona". Se tuvo que ir a un acto así que me dejó con "dos millones de preguntas" diría Román (estoy imaginando su tono de voz cuando le dice eso a sus entrevistados). No vuelvas tarde Jadan, quiero (necesito) saber más.

State of Myths es una serie de 30 capítulos que ha contado con un presupuesto del equivalente a 600.000 Euros. La retransmitió el primer capítulo la televisión iraquí y en las redes ya es un fenómeno. Mohammed Thaer Al Hasnawi, su autor, vive en Bagdad y se ha convertido en un símbolo de quienes quieren que el mundo se entere que en Irak no todos están a favor de estos terroristas que están destruyendo Oriente. En una reciente entrevista a la NBC dijo "Si no puede con tu enemigo, únete a él".



Los objetivos de la telenovela son dos: por un lado evitar que hayan jóvenes que deseen alistarse a las filas de Estado Islámico. La figura de Al Bagdadi (el autoproclamado califa del EI) es ridiculizada en diversos capítulos. Y por otro lado cree que los televidentes logarán reirse y disminuir el miedo. En la serie aparecen personajes como Drácula, Joker, Stalin e incluso la primera Dama de Qatar.

No estoy segura de que esta serie me entretenga (si bien arranca como un musical el diálogo es en árabe) pero de lo que no me cabe duda es de que dará que hablar.

lunes, 17 de noviembre de 2014

Su objetivo te ayuda a vislumbrar Gaza.


Cuando escribo suelo hacerlo sin música. No logro concentrarme. Me pasa lo mismo cuando leo. No necesito silencio absoluto, pero sí sumergirme en la historia. Si la historia me atrapa lo suficiente, el mundo me sobra.

Eman Mohammed ha logrado atraparme. Con su historia, con la música que ha elegido para que suene mientras miro el portfolio en su página web, con sus imágenes y el objetivo de su cámara fotográfica. Empezó con una Nikon d70 medio destartalada que le dieron en Ma'an News Agency, la agencia en la que trabajó durante casi dos años apenas empezaba su carrera como fotógrafa periodística. Su jefe por aquel entonces la obligó a renunciar, tener a una mujer trabajando para ellos retratando el conflicto de la Franja de Gaza era demasiado revolucionario (y peligroso). Pero ella no bajó los brazos, se compró una cámara mejor y empezó a inmortalizar el conflicto como nadie antes lo había hecho. Con la mirada única de mujer. Permitiéndose entrar en lugares donde los hombres no podían ni tan siquiera mirar. 

Gaza, Palestina, Israel. Son los nombres que se escriben en periódicos, que invaden noticieros y que a miles de kilómetros nos cuesta tanto entender. ¿El motivo? Nuevamente un territorio. ¿Es tuyo? ¿Es mío? ¿Por qué? ¿Quién tiene razón? ¿Quién tiene el poder? Son tantas las razones históricas que llevan a un país a entrar en guerra… Intereses económicos, culturales, políticos

Lo que para la mujer occidental es algo normal, para la mujer oriental es un derecho por el que todavía tiene que luchar. Por ejemplo salir sola a la calle: hoy ni siquiera se tiene en cuenta a la pareja cuando una amiga te pregunta si quieres ir a tomar algo a tal bar o sumarte a un “finde de chicas”. Si quieres, simplemente vas; en otras partes del mundo hay quienes todavía piden permiso a un marido o a un padre. Mientras muchas están atentas a las últimas tendencias de moda que las guían en las compras, otras deben taparse de arriba abajo por respeto a quien las mira. Unas pensamos en las opciones de partidos y políticos que tenemos para votar (no vemos la hora de que lleguen las próximas elecciones para plasmar con el voto en quien confiamos para gobernar, el debate no se establece en si tal sexo o tal otro puede sino a qué edad lo hará), otras no pueden ni tan siquiera opinar si el gobernante de turno debería o no cambiar. Saber (y poder) manejar un auto forma parte de nuestra libertad. En Arabia Saudí hay mujeres que se manifiestan y rebelan porque no les está permitido conducir (algunas han muerto tan solo osando salir).

De vez en cuando, tomar conciencia de que hay mujeres en el mundo cuya situación es abismalmente opuesta a la nuestra no está mal. 


Eman Mohammed es una reportera palestina de 26 años que desde 2006 cubre el conflicto en la Franja de Gaza. Es una activista aparte de una fotógrafa de primera. Ella entra donde otros periodistas no pueden entrar. Capta con una visión única el conflicto. Retrata el sufrimiento por haberlo perdido todo, pero a su vez lograr inmortalizar la esperanza, es capaz de mostrar en una foto la mirada de alguien que vuelve a empezar, la de la resignación, la del desasosiego, la de la incertidumbre, la de una madre que protege a su hijo... Eman, de un modo único, a través de su objetivo nos hace pensar. 

Eman tiene dos hijas mujeres, la más pequeña nació un día después de que terminara la segunda guerra en el lugar. "No puedo quedarme en casa cuando estamos en guerra", fueron sus palabras en la entrevista que le concedió vía chat a Grey Hutton, periodista de Vice. Hoy vive entre EEUU y Gaza. Da conferencias TED, expone sus fotografías y alberga en su casa a gente que se quedó sin hogar. Eligió proteger a su familia tras un ataque que sufrió un vecino en Gaza y del que su hija más pequeña salió lastimada. 


Me quedo con la frase que menciona al terminar una de sus conferencias: "Me convertí en un testigo con opciones: huir o permanecer firme". Ha sido afortunada. Puso a salvo a su familia y con el apoyo de su marido y sus hijas vuelve a Gaza para que quienes no vivimos el conflicto, podamos, al menos, vislumbrarlo.


















martes, 11 de noviembre de 2014

Google, ¿quieres mi genoma? Yo quiero tu negocio.



Google quiere almacenar tu genoma. 
¿Cuál? ¿El mio? ¿Para qué? ¿Cómo lo obtiene? ¿Qué gano yo? Todo eso es lo que pensé después de leer esta noticia. Y de repente me acordé de la foto que encontró un amigo en Google View donde salían mi marido y mi hijo en la esquina del colegio. A ellos les pareció gracioso. A mi no tanto. 

Supongo que la siguiente de Google será: "Google se mete en tu cama y te ayuda a ponerte el pijama." Esa noticia me haría reír. Esta otra por el contrario hace que tema lo que puede representar que un gigante de la informática almacene datos tan valiosos como la información genética de miles y miles de personas dispuestas a compartirlos por 25 U$D anuales.  ¿Cómo, además hay que pagar? Pues si. Google es una empresa y como tal se encarga de hacer negocios. El objetivo de Google no me queda claro que sea ayudar (asi es como venden la noticia "la herramienta de Google serviría para que los expertos pudieran determinar claves de varias enfermedades") Ellos son visionarios, captan los intereses de la gente, identifican la demanda y actúan. ¡Bravo Google! 

Debo decir que me puse en contacto con gente de Google Argentina intentando que ellos me explicaran bien el sistema de obtención de datos. Tengo dos millones de preguntas (diría Lejtman). Pues bien Roman, yo también... Las mías son: ¿Se tiene o no un acuerdo ya establecido con algún laboratorio? ¿Cómo van a revelar los datos? ¿Cómo será el consentimiento de la persona que los cede? ¿Se ocuparán solo del almacenamiento? ¿Cómo será el registro de quien inserte ahi su genoma? ¿A quiénes venderán luego esas bases de datos? La respuesta diplomática del empleado de Google fue: "Lamentablemente no tenemos más información que la q está publicada y no cuento con un vocero autorizado para hablar de este tema en Argentina.". Gracias igualmente Maty, tendré que creerte. 

Contar con semejante información privilegiada es poder. Y el poder hay que saber usarlo. Y para saber usarlo hay que estar formado. Y para formar hay que educar. Y educación es lo que suele faltar en estos casos (¡y en otros muchos!)

La ciencia y la tecnología avanzan de tal manera que llegará un momento que de nosotros se sepa todo. Para eso, necesitamos que quien tenga el privilegio de "saber" cuente con toneladas de ética para poder encauzarlo. Si no se puede producir el mismo efecto que si le damos "toneladas de dinero" a un aficionado al juego o un Ferrari a un niño de 10 años. Si no sabemos el valor y el poder de lo que tenemos entre manos, es muy difícil ser consecuente y responsable con su uso y empleo.

Respecto a este servicio que ofrece Google, el debate se basa en estos dos puntos:

1- Por un lado contar con tantos genomas distintos ayuda a que los estudios se hagan en poblaciones del todo dispares y eso es favorable para las investigaciones, hoy tan costosas y que eligen un nicho de población determinado y acotado. Para los laboratorios, los médicos y los científicos esta es una gran posibilidad para potenciar la búsqueda de soluciones a enfermedades y así prevenir. 

2 - Por otro lado, nos encontramos frente a la posibilidad de que quien sea poseedor de ese banco de datos pueda venderlos a las empresas (con  suficientes fondos para comprarlos) y asi saber las probabilidades que tiene un futuro empleado de contraer cáncer, diabetes o de que un gen mute como lo hicieran otros de su familia y desarrolle algún tipo de enfermedad. Si ese fuera el caso ¿qué haría la empresa? Entre un candidato con mayor probabilidad de sufrir alguna enfermedad (y lo que eso tiene de coste para la empresa pro las bajas a las que seguro se aferra) y otro con menor riesgo, ¿con cuál se quedaría?

Yo también imagino la respuesta... Además, Google me cobrará por el almacenamiento pero ¿a mi me vendrán a buscar para preguntarme si conmigo pueden investigar? Si es así... ¿me pagarán?

Estoy feliz por formar parte de una generación que ve que la ciencia avanza. Me siento más tranquila cuando pienso que el cáncer, tan común hoy entre todos, será como la gripe para nuestros antepasados. Quiero pensar que se encontrarán curas para el ébola, que el parkinson, el alzheimer y la esclerosis tendrán solución. Pero no me gusta sentir que me manipulan. No me gusta pasar los límites de la ética.Y a decir verdad... me gusta que la vida me sorprenda. Si, aunque Google un día me lo ofrezca, me gusta ser yo quien se ponga el pijama.

lunes, 10 de noviembre de 2014

Mas me está haciendo pensar...

¿Has votat? (me preguntó María, la única amiga catalana en Buenos Aires con la que hablo catalán) Ella sí lo hizo. Vino desde Tigre con Teresa, su hija de 20 días y después de 25 km y casi una hora en coche, en la calle Echeverría 1515 esquina Libertador contestó a las dos preguntas que Artur Mas pide que respondan los catalanes: ¿Quiere usted que Cataluña sea un Estado? En caso afirmativo, ¿quiere usted que sea un Estado independiente?.  Como ella, lo han hecho 350 catalanes más en Buenos Aires. En México DF, Bogotá, Santiago de Chile y San Pablo hubo centros donde acudir.

Lo cierto es que no encontré mi DNI español  (a diferencia del pasaporte, solo puedes tramitarlo en España por eso lo guardé con ahínco, tanto que todavía no sé en qué cajón está...) así que me quedé sin expresar mi decisión. Me cuesta posicionarme sin vivir el día a día pero entiendo ese resentimiento que con el paso de los años se ha ido gestando entre los catalanes y el Gobierno central.

Hoy es el "día después" del #9N. Siendo catalana todos mis amigos aquí me preguntan ¿Qué sientes? ¿Qué te parece? ¿Qué opinión tienes? ¿Qué dicen los de allí? Y yo en realidad me siento como quien se va de casa a vivir fuera y luego pretende opinar y decidir cómo se tiene que organizar la familia que se ha quedado dando indicaciones. Mostraría tal vez poca inteligencia emocional. "Hay cosas que para opinarlas, hay que vivirlas", me dijo ayer una periodista amiga.

Yo desde Buenos Aires soy solo una observadora más pero de algo estoy segura y es de que Cataluña hará historia.

Nacionalismo no es lo mismo que independentismo. Deseos de nación tienen muchos territorios en el mundo. Cuestiones históricas, culturales, idiomáticas e ideológicas hacen que algunos pueblos quieran ser naciones y se sientan distintos al entorno que los rodea. En Cataluña, este deseo se ha intentado resolver a través de acuerdos. Son un ejemplo para un mundo en el que a veces algunos de los "desacuerdos" han desembocado en conflictos bélicos. Los catalanes llegan pacíficamente a un punto importante de la negociación.

Han salido a la calle cerca de dos millones y medio de personas (2.305.290 para ser exactos) para responder a las preguntas que antes he mencionado. Los voluntarios  (unos 40.000) se han hecho cargo de velar por las urnas. La prensa internacional destaca el proceso participativo. En términos democráticos,  aunque Rajoy se empeñe en decir lo contrario, ha sido un éxito

España no ha sabido seducir a los catalanes, España no ha querido negociar. (¿Será que no sabe?). En la negociación se tiene que ceder  y se tienen también que entender cuáles son los intereses de cada uno de los "bandos". No se puede oprimir, que es lo que lleva haciendo España con Cataluña en estos últimos años. El famoso Estatut, aprobado en el 2003 por el Parlamento Catalán y finalmente consensuado por el Gobierno de Rodríguez Zapatero fue impugnado por el Tribunal Constitucional después de haber recibido una denuncia del PP. Y vuelta a empezar.... Cuando oprimes, la gente se "rebota";  y si se rebota, pide votar.

Los catalanes hoy están contentos. Se creen vencedores. Su decisión, todavía no es vinculante, el blindaje legal en el que se escudan los contrarios no tengo claro que vaya a funcionar. Ellos (los catalanes) solo querían sentir la democracia en su piel, que les dejen decidir cuál será su futuro. Quieren someterse a una cirugía. Y como en toda operación, hay riesgos. Una gran parte de los catalanes está dispuesto a asumirlos.

Artur Mas es un político de primera. Tiene un gran sentido común.  Cuando trabajé en AB (una empresa de azafatas en eventos y congresos) tuve oportunidad de conocerlo y  tratarlo. Me causó una excelente impresión, totalmente opuesto a Joan Clos (fue alcalde de Barcelona entre los años 1997 y 2006, no dejaba que lo miraran a los ojos los empleados en actos oficiales, nunca una sonrisa, nunca un gracias) Mas, por el contrario, tiene carisma, es inteligente, es un estratega y le gusta ganar. ¿Lo conseguirá?

Artur, sigo sin querer que Cataluña se "vaya" de España pero tu estilo me gusta. Por el momento a mí, me estás haciendo pensar...



martes, 4 de noviembre de 2014

Confío en ti. Yes, you can!



-Son 400$. 
-¿Cuánto? ¿Cuatro-cientos? ¿Pero aplicó usted el descuento de la prepaga*?

Sí, lo había descontado. Mi hijo es asmático y tiene dermatitis atópica. Usa una medicación que tengo que comprar con bastante frecuencia. Primero fueron los inhaladores, luego las cremas con corticoides, luego el tratamiento preventivo. Es un "nunca acabar" pero no deja de ser algo totalmente controlable. Al menos, eso dice el Dr. Echezarreta. Que es un genio. No he probado la homeopatía... (en realidad sí, pero no tuve paciencia para sostener lo de las "bolitas que no puedes tocar" y los átomos y todas esas historias).  De todas maneras, de la alarma que me avisa para no olvidarme ningun puf  y de la medicina no me libro. Siempre que salgo de la farmacia me hago la misma pregunta. Si a mí, que dentro de todo no puedo quejarme porque llegamos siempre a fin de mes, me parecen precios disparatados y me cuesta (y duele) pagar, ¿cómo hacen quienes realmente no tienen ni para comer?

La misma pregunta me hago cuando escucho a familias amigas que se disponen a pedir un crédito al banco. En Argentina todavía se conceden (aunque a 10 años como mucho, lo de los 30 españoles creo que ni con el crédito Procrear.) En España, en estos últimos años, las garantías y condiciones que te exige el banco avalan la idoneidad prácticamente a quien no necesita dinero para comprar... nada. Supongo que si dinero llama a dinero, pobreza llamará a pobreza. 

Desconozco cuál es el concepto de pobreza que tiene cada uno de los que están leyendo este blog. De algo estoy segura y es que cuando palpas la miseria con tus manos, el concepto que tenías de "persona pobre" adquiere otra dimensión. Si no, pregúntale a cualquiera de los que estuvieron en India, por poner sólo un ejemplo. La pregunta del millón es: ¿Cómo lo hacemos? ¿Cómo combatimos la pobreza? ¿Cómo la erradicamos? 

Por eso me pareció tan interesante la invitación que recibí para asistir a la sexta edición del Global Social Business Summit que se realizará entre los días 25 y 28 de noviembre en la Ciudad de México. Es la primera vez que se lleva a cabo este evento en el continente americano. Las ediciones anteriores tuvieron sede en Alemania (2009 y 2010), en Austria (2011 y 2012) y en Kuala Lumpur, Malasia, en el 2013 donde en noviembre del año pasado se confirmó México como sede para el evento que se desarrollará a fin de mes. 


La importancia del evento es que funja como un detonador para impulsar negocios sociales en América con el fin de contribuir al desarrollo sostenible. Se reunirán tomadores de decisiones en el sector privado, público, así como académico del más alto nivel global, con el fin de buscar soluciones para erradicar la pobreza extrema en el mundo a través de los negocios sociales.

Contará con la presencia de Muhammad Yunus, un economista y banquero de Bangladés, fundador del Grammen Bank (cuya Fundación en Argentina está a cargo del Dr. Pablo Broder). Yunus es el impulsor de los microcréditos para personas de escasos recursos. Él sabe que la banca presta al que ya tiene y lo combate. En su libro Un mundo sin pobreza explica cómo hay que salir de la pobreza por medio del esfuerzo propio. Dos valores fundamentales son la confianza y el reconocimiento al valor de la persona. Este sistema funciona porque mantiene la dignidad de quien lo recibe, es dinero que fluye y se recicla, no se trata de asistencialismo. Recibió el Premio Nobel de la Paz en el 2006 y años después dijo: "Antes del Nobel no me oían. Ahora me basta con susurrar". 

A Yunus no le interesaban los títulos si sólo le servían para enseñar teorías y no podía aplicarlos para mostrarle a un pueblo el camino para salir de la miseria. Ha sido un visionario; además, convirtió la frustración en acción. Así es como se solucionan los problemas. ¡Cuánto tenemos que aprender! 

A veces necesitamos ejemplos, saber que se puede, que nos enseñen el camino. Yunus pretende eso, a los más pobres prestarles el dinero para comprar la caña y salir a pescar; a los más ricos, a no desperdiciar las oportunidades que la vida les ha podido dar. 

* Quienes tiene prepaga en Argentina cuando van a la farmacia tienen un descuento en los medicamentos que compran con receta médica. Normalmente es de un 30% en cualquier forma de pago. 

lunes, 3 de noviembre de 2014

Con lo tuyo hago también lo mío.




Mi hermano Iñaki tiene 23 años, vive en Londres. Tiene un trabajo relativamente estable con el que está satisfecho aunque con su sueldo (unos 1500 U$D) alcanza para pagarse la habitación que comparte en Battersea (paga alrededor de 450 libras esterlinas), comprarse la tarjeta  Oyster (que le reduce considerablemente el precio del viaje en transporte público) y seleccionar los productos para celíacos que hay en el supermercado Tesco (como un Mercadona español o un Disco argentino).

La última vez que estuve con él me dijo que se iba a Praga, el mes anterior había estado en Oslo. ¿Cómo lo hace? Pues busca vuelos en www.sckyscanner.com y alojamiento a través de www.couchsurfing.com una plataforma en Internet que te conecta con gente de otros países dispuesta a prestarte su sofá para que pases la noche. A través de un comentario en la página evalúas el servicio y de ese modo se generan las referencias en tu perfil de usuario.

María, una prima de Zaragoza, tiene a su novio viviendo en Toulouse. Está buscando cómo ir esta semana sin que afecte demasiado a su bolsillo. Se independiza dentro de poco y necesita ahorrar. Publicó en su perfil de Facebook : ¿Alguien para ir a Toulouse este viernes? Una conocida suya le posteó esta página:  www.blablacar.es (¡Hasta el nombre me parece acertado!). Ellos conectan a pasajeros con autos que tengan asientos libres. Dependiendo de las plazas, del tipo de auto y del lugar pagas más o menos. Pero tú eliges.  Tienes opciones de: precio, horarios de salida apróximada, si prefieres que el conductor tenga experiencia en llevar a gente o si es su primera vez. Como quien probó Tinder una vez y ya no pudo parar de poner “me gusta” en algunos de los perfiles vinculados a Facebook que aparecen y empieza la conversación instantánea diciendo: “Hola, ¿qué tal? La verdad es que soy nuevo en esto” (y ya era su quinta conversación...).

A lo que íbamos, en este momento hay 2 plazas disponibles a 25 euros. Especifica que va por autopista. Buenísimo. María este fin de semana verá a su novio por menos de lo que pensaba gastar.


Loli se fue a vivir a Pilar hace dos años. Vendió su departamento y cuando se puso a buscar opciones se dio cuenta de que una casa en Pilar con jardín y pileta le resultaba mejor opción a pesar de la contra de tener que usar el auto para absolutamente todo. Aquí (en el centro de Buenos Aires) vivían su madre y su hermana, así que tuvo que buscar alternativas para que las horas en el country no le resultaran tan pesadas. Se asoció con Ángeles, su hermana, y juntas armaron MayLo Bordados. Buscaban un lugar donde dar sus clases de bordado mexicano en el centro. Finalmente encontraron un local que por la mañana no tiene utilidad, es un salón de fiestas, ella le paga a la dueña del salón por día de clase. Loli todavía no lo sabe pero a esto se le llama consumo colaborativo.


El consumo colaborativo se basa en la filosofía del acceso y no de la propiedad. Es un modo de compartir recursos o servicios a través de plataformas sociales haciendo uso de la tecnología. En el 2012 esta tendencia explotó.


Albert Cañigueral es un ingeniero multimedia catalán que leyó mucho acerca de este término. Todo lo que había escrito hasta el momento estaba en francés y en inglés. Él fue quien impulsó el movimiento a través de su blog. En esta página encontrarás todo lo que necesitas saber de este tipo de movimiento económico. Ha sacado un libro muy interesante que se llama Vivir mejor con menos.

En Argentina quien sabe mucho del tema y tiene una web super completa es Marcela Basch, que es quien está a cargo de el plan c en cuya web encuentras una guía con las iniciativas colaborativas en Argentina. 

¿Si existen miedos? Pues como en todos los proyectos, hay cosas que todavía no están cerradas del todo. No está del todo claro cómo tributa. Se está buscando crear la figura del "ciudadano micro productor" que es quien tiene una actividad donde se factura sólo de vez en cuando.

Para que esto funcione hay que tener en cuenta algunos factores:

1.     La confianza: la mayoría de estos negocios surgen en ámbitos cerrados, después de un tiempo se empiezan a abrir al resto del público.
2.     Las garantías: que son el valor agregado de los intermediarios.
3.     La reputación: que se basa en los comentarios de los usuarios.

El desafío hoy de esta tendencia es que tenga éxito y viabilidad dentro de un marco capitalista. Pero algo me queda claro, lo de "usar y tirar" ya no va más. Ahora se crea, se usa e incluso se comparte. O sea que con "lo tuyo" puedo lograr también "lo mío".