El mundo de los productores, como el de los actores, es a veces visto
como frívolo. Eso es porque hemos construido imágenes que la fantasía nos ha
permitido hacer ¿a partir del cine? No lo sé, vamos a preguntárselo a Axel
Kuschevatsky, co productor de Relatos
salvajes, película que tuvo nueve nominaciones a los Goya de las que
obtuvo una estatuilla, la de mejor película iberoamericana.
Axel es una sorpresa para mí.
Tiene carisma, te hace sentir cómoda, cuenta hasta lo que no le preguntas,
habla de cine, nombra a genios con quienes ha tenido el lujo de trabajar
(quiere volver a hacerlo con casi todos), te da todo el tiempo del mundo… Hoy
es un día especial. Lleva dos semanas fuera de casa, viaja normalmente una vez
por mes, atiende compromisos profesionales sobre todo en España, es el
responsable de contenidos de cine del Grupo Telefónica.
¿A tu familia le pesan tus viajes?
Mi familia me apoya y entiende mi trabajo, no siempre pueden
acompañarme. A veces a mis hijos los uso de testers. No hay nada más interesante que poder transmitirles a ellos
el amor por lo que hago, compromiso, foco. Creo que soy buen padre en la medida
en que, mira, te voy a dar un consejo de padre (Axel está convencido de que
tengo unos 18 años, y me habla a lo largo de la entrevista un poco desde ese
lugar hasta que le confieso que tengo cuatro niños de la misma edad que los dos
suyos). Hay un punto en que lo peor que le puedes dar a un hijo es la idea de
la conmiseración, y el tener pena de uno mismo es perverso. Hay padres que
transmiten eso y para mí es como anular la identidad del otro. Mis hijos ven
alguien convencido de lo que hace y cuando las cosas están mal no hay otra
opción que seguir adelante.
¿Cómo fue trabajar en Relatos salvajes?
A Damián Szifrón (guionista y director de la película) hace más de 20
años que lo conozco. Ya cuando estudiaba supe que era un genio. Fui de los
primeros en ver El Piloto de los
simuladores. Se lo llevé a Telefe e hicimos la serie. Hacía siete
años que no escribía cine y eso me generaba un poco de ansiedad. Yo leí Los cuentos asombrosos de Damián Szifron. Eran
historia con ejes comunes que terminaron convirtiéndose en Relatos... Lo leí en 45 minutos,
me di cuenta en la tercera página de que era una genialidad.
Y lo ha sido. Axel es alguien a quien le gusta actuar como catalizador
del talento que encuentra en otros. Cree que lo único que recorre la línea
entre una buena película y una mala es precisamente eso.
Lo conviertes todo en oro…
En realidad es al revés: yo veo el oro y me acerco.
(Insiste en que forma parte de un equipo, nombra a cada uno y deja claro
que esto es un trabajo de todos).
Relatos… existe por Hugo y por Damián (se
refiere a Hugo Sigman, de K & S, la productora de cine que crearon Oscar
Kramer, ya fallecido, y él). Un poco más tarde se sumó El Deseo, la usina
de los hermanos Almodóvar y Esther García.
Esta no es un película pequeña. Damián escribió algo que es como un
“serruchito” emocionalmente. Se trata de un largometraje con estructura fuera
de lo común. Hay gente que piensa que el diálogo con el espectador se
genera a través del silencio. Damián juega con la empatía del espectador.
Construye el diálogo con la audiencia. Y esto tiene que ver con la capacidad
narrativa que posee este director y guionista de “manipular” (lo digo de manera
positiva -aclara-) la emocionalidad del espectador y de llevarte a un
determinado lugar donde esperas reaccionar de una manera y finalmente lo haces
de otra. Eso requiere mucha precisión para que rías o llores. En definitiva uno
construye sobre ideas, pero avanza sobre emociones.
No está exento de la polémica que se ha generado en España con el 21%
de IVA que convierte al cine en un consumo de lujo. Agradece a todos los que se han interesadopor una película, salen
de su casa, con calor o frío, y se sientan en una butaca espectantes por lo que
la película puedes ofrecerles.
Además, es el encargado junto a Liza Echeverría de la antesala de los
Oscar para 80 millones de abonados a TNT.Aprovecho y le pregunto por ello
Vuelas el lunes a Buenos Aires.
¿Estás nervioso por los Oscar…?
Relatos salvajes cuenta con serias
posibilidades de llevarse uno.
Para mí el Oscar es como para las mujeres el verano. Ellas piensan en el
biquini y yo en la triple papada.
¿Cómo ves el mercado americano?
EEUU no es un mercado más importante que el de China. Hoy el mercado
internacional representa el 60% de los ingresos de un filme; USA y Canadá,
el 40%. Los estudios están obsesionados con hacer películas globales. Eso
nos da la oportunidad a nosotros de hacer películas que ellos no harían nunca.
Así que tenemos posibilidades de hacer más películas “de autor” y películas
locales. Este año, estas últimas han sido las más taquilleras.
¿Qué nos cuentas acerca de tus
próximos proyectos?
Hace unos días anunciamos un proyecto con Álex de la Iglesia. Trabaja
con el mejor guionista para mí de España: Jorge Guerricaechevarría. (Carne trémula, El día de la bestia, Celda
211 –por la que ganó el Goya al mejor guion adaptado en el 2009– El niño). Ellos escribieron esta
película que se llama Mi gran noche.
Es una comedia que cuenta cómo se graba en agosto el brindis de fin de año de
TVE1. (en España es todo un evento la retransmisión desde la Plaza del
Sol del brindis y la ingesta de uvas al son de las 12 campanadas). Son 20
personajes, una sola localización durante la grabación... Muestra la
rivalidad de un cantante joven POP (Mario Casas), su representante
argentino y una celebridad de la canción romántica legendaria (Raphael) y su
asistente ruso. Santiago Segura, Hugo Silva, Pepón Nieto, entre otros, formarán
parte del elenco. Será una de las grandes películas del 2015 o 2016.
Axel Kuschevatsky se entrega. Se acuerda todavía de la panadería del
enano, un comercio de Ramos Mejía, una localidad de Buenos Aires de la que se
siente hijo adoptivo. Es un ciudadano de mundo, un genio que cree en el valor
de las pequeñas grandes cosas, una persona capaz de generar confianza y
construir éxitos. Reconoce a su gente y por eso ha llegado a donde está sin
dejar de ser un tipo normal.